El País se hace eco de la creación de la Biblioteca Digital Mundial, una re-encarnación de la Libreria del Congreso que tanto me fascina. Es gracioso que el periodista elabore todo el artículo sobre esta foto y el periódico, sin embargo, la omita.
La tengo fichada hace tiempo, esperando una oportunidad para dedicarle unas líneas. Retrata al presidente Lincoln, en uno de los momentos mas importantes de la guerra de secesión, la batalla de Antietam, 23.000 muertos en un dia. A su lado está la máxima autoridad militar, el General McClelland y el responsable de su seguridad, Alan Pinkerton, fundador de la infame agencia de detectives que lleva su apellido, famosa por sus cazas de sindicalistas y lideres obreros, por su manipulación de jueces y sheriffs al servicio de los poderosos, y porque tuvo empleados ilustres, como Dashiel Hamett. En su momento, tenia mas soldados que el ejercito de Estados Unidos. Era, de hecho, un ejército privado al servicio de unos pocos robber barons -los Rockefeller, Carnegie, Vanderbilt, Morgan, millonarios sin piedad que casi liquidan el sistema democrático- y ejercian el poder sin control alguno. Algunos estados, asustados, llegaron incluso a prohibirla. Curiosamente, la agencia aun está activa. Es parte de un conglomerado sueco, Securitas A.B.
El Lincoln que creó a Pinkerton es el mismo que dijo que el trabajo es previo a, e independiente del,el capital es solo fruto del trabajo y nunca podría haber existido si no hubiese existido antes el trabajo. Y que el trabajo es superior al capital y merece la mayor consideración. Puro cinismo, supongo.
Lo interesante de la foto no es solo el momento. Hasta entonces no solia haber testimonios fotográficos de los momentos históricos. La serie a la que pertenece esta foto, de Alexander Gardner, es parte de la cobertura de la guerra organizada por Mathew Brady. Las limitaciones técnicas de los procesos primitivos le impedían fotografiar la acción, pero lo compensaba con creces moviendo cadáveres y atrezzo hasta satisfacer su sentido del drama. Gardner era también un tipo extraño, un escocés socialista que seguia las ideas de Robert Owen y emigró a Estados Unidos en 1850 para fundar una cooperativa en Clydesdale (Iowa) con dinero recaudado en su tierra. En aquella época, Estados Unidos era el destino natural para los que querían crear alguna comunidad útopica. Y hubo cientos de ellas. Mientras sus correligionarios seguían con el empeño, Gardner volvió a Escocia para recaudar fondos y buscar mas socios. Compró un semanario socialista, que tuvo mucho eco y fue un buen negocio. Cuando volvió a Estados Unidos, se encontró con que su hermana y su cuñado habían muerto de tuberculosis y su comunidad estaba agonizando. Se instaló en Nueva York, donde encontró trabajo con Brady y el resto es historia.
Hay dos versiones de la foto. Esta es la mejor: La composición, la actitud de los personajes, su situación respectiva, la forma en que coloca las cabezas sobre las lineas inclinadas marcadas por las tiendas, el uso del ambiente, la luz... la indefinición del rostro de Lincoln, que contrasta con la aviesa mueca de Pinkerton y la fijeza del de McClelland... Todo configura lo que para mi es una obra maestra del retrato.
El Lincoln que creó a Pinkerton es el mismo que dijo que el trabajo es previo a, e independiente del,el capital es solo fruto del trabajo y nunca podría haber existido si no hubiese existido antes el trabajo. Y que el trabajo es superior al capital y merece la mayor consideración. Puro cinismo, supongo.
Lo interesante de la foto no es solo el momento. Hasta entonces no solia haber testimonios fotográficos de los momentos históricos. La serie a la que pertenece esta foto, de Alexander Gardner, es parte de la cobertura de la guerra organizada por Mathew Brady. Las limitaciones técnicas de los procesos primitivos le impedían fotografiar la acción, pero lo compensaba con creces moviendo cadáveres y atrezzo hasta satisfacer su sentido del drama. Gardner era también un tipo extraño, un escocés socialista que seguia las ideas de Robert Owen y emigró a Estados Unidos en 1850 para fundar una cooperativa en Clydesdale (Iowa) con dinero recaudado en su tierra. En aquella época, Estados Unidos era el destino natural para los que querían crear alguna comunidad útopica. Y hubo cientos de ellas. Mientras sus correligionarios seguían con el empeño, Gardner volvió a Escocia para recaudar fondos y buscar mas socios. Compró un semanario socialista, que tuvo mucho eco y fue un buen negocio. Cuando volvió a Estados Unidos, se encontró con que su hermana y su cuñado habían muerto de tuberculosis y su comunidad estaba agonizando. Se instaló en Nueva York, donde encontró trabajo con Brady y el resto es historia.
Hay dos versiones de la foto. Esta es la mejor: La composición, la actitud de los personajes, su situación respectiva, la forma en que coloca las cabezas sobre las lineas inclinadas marcadas por las tiendas, el uso del ambiente, la luz... la indefinición del rostro de Lincoln, que contrasta con la aviesa mueca de Pinkerton y la fijeza del de McClelland... Todo configura lo que para mi es una obra maestra del retrato.
2 comentarios:
me parece una foto majestuosa, transmite una fuerza increible y da bastante miedito, mas despues de saber a que momento pertenece y la historia que hay detras
Se agradece el feedback! Gracias por pasar por aqui.
Publicar un comentario