
Las fotos merecen las 400.000 entradas que le dedica Google: buenas imágenes de la vida en la calle de Chicago durante 40 años, exquisitamente compuestas en el formato cuadrado del 6x6. Tuvo que empeñarse mucho para que nadie les hiciera caso. Y prueban una sensibilidad muy especial. Probablemente fotografiar era para ella un acto íntimo.
Parece que además era todo un personaje: llegó en los años 20 a Chicago desde Francia, era feminista, socialista, vivió siempre a su aire, llevaba zapatos y chaquetas de hombre, mantenía las formas y las distancias. Lo poco que se sabe de ella es lo que recuerdan los empleados de la tienda donde llevaba sus fotos a revelar y algunas familias que la emplearon como niñera cuando llegó al país.
Lo que me preguntaba, mientras lo leía, además de lo obvio, es: dentro de 50, 60 años, ¿qué encontraremos? ¿discos duros averiados? ¿tarjetas de memoria? ¿imágenes de algún fotógrafo escondidas en algún servidor? ¿páginas webs desconectadas por falta de pago? ¿Raws sin procesar de algún modelo de cámara desaparecido? ¿la imagen digital, que nunca acaba de estar fijada en ningún sitio, permanecerá con la misma solidez? ¿Será relevante todavia entre los millones de imágenes que se toman cada dia, la obra de algún aficionado especial?
3 comentarios:
"Tuvo que empeñarse mucho para que nadie les hiciera caso"
Morirse siempre ayuda mucho a que la gente te valore.
A ver si dedicas alguna entrada a los vivos y locales, no sea que dentro de 40 años te tengas que arrepentir jeje
VAya maravilla.
Gracias por estos acercamientos.
Larraz, de nada... un placer
Friko, lo que mas me preocupaba es que quedara de lo nuestro, esas estupendas fotos de Moais tuyas, por ejemplo, en 50 0 70 años... El digital me resulta tan frágil...
Publicar un comentario