Predicciones

Me tropiezo en TOP con un largo artículo relativo a unas predicciones realizadas por The Economist en 1992. Lo desentierra Eamon Hickey, uno de sus colaboradores, en el marco de la investigación para una historia de Nikon.

"Alabados hace tiempo por ser los exportadores mas fieros de Japón, los productores de cámaras de ese país barrieron a la competencia proponiendo a los consumidores brillantes tecnologías. Ahora parece que les ha llegado el turno de ser barridos...

La empresa que mejor y mas rápidamente ha sabido entender las tendencias del mercado ha sido Fuji... que ha cogido por sorpresa a los fabricantes tradicionales con una serie de cámaras de un solo uso...

Según la mayoría de los analistas, dentro de cinco años solo existirá un fabricante de cámaras en Japón: Fuji, inventor de la cámara desechable. Los demás fabricantes se integrarán en la industria electrónica o acabaran en el basurero de empresas en el que los fabricantes de cámaras alemanes y americanos acabaron su vida hace 20 años..."

El primer impulso es partirse de risa, luego volver a plantearse preguntas recurrentes estos meses. Lo de la crisis sistémica-económica-financiera etc. Normal que no la vieran venir, si hacen análisis así de rigurosos. Lo sorprendente es que después de cien años de predicciones fallidas, análisis erróneos y previsiones incumplidas, los periódicos sigan cargando sus primeras páginas con las cagadas de profetas como The Economist, el FMI, el Banco Mundial, etc. Y sin añadir acotaciones o matices. Algunos, aunque no tengan cien años ya cargan con un pasado suficientemente siniestro, como el FMI o el Banco Mundial, que no solo se equivocan en sus profecías, además han impuesto los países tercermundistas soluciones económicas que han costado centenares de miles de vidas y les han negado los remedios que ahora aceptan en países del primer mundo.

Pues a pesar de las evidencias, las predicciones -sobre todo las negativas- llenan las primeras páginas de los periódicos-sobre todo de los ultraconservadores- y producen espectáculos ridículos, como ver a Rajoy reprochar a Zapatero las predicciones catastróficas del FMI. Y Zapatero hasta se molesta en contestarle...

El mundo es muy raro.