La llegada de la fotografía digital, además de permitir que los fabricantes de material fotográfico acudan a una feria históricamente concebida para vender radios y tradicionalmente dedicada a las novedades electrónicas, el IFA de Berlín, hace aplicable a las cámaras la famosa
ley de Moore. Las prestaciones se multiplican a un ritmo asombroso, exponencial. Ya hemos superado los 20 megapixels.. ¿Y que? La evolución del mercado también prueba que es difícil deshacerse de los viejos modelos mentales, de la monumental inercia histórica. Así que casi todo el barullo se centra en las cámaras reflex, monstruos ruidosos, delicados y poco prácticos, que alcanzan un grado de desarrollo increíble. Además, resultan cada vez mas baratas. Se puede comprar una magnifica Olympus E500 por 400 euros, la Pentax k100 está de oferta por 399 en muchas webs, la Sony A100 esta también barata barata... Hasta el punto de que hacen que el único diseño interesante que ha nacido en la era digital, las cámaras bridge, seudoreflex, estén cayendo en desgracia...
No me excita mucho lo que he leído. Mas rapidez, mas megas, mas prestaciones relativamente utiles, mas "gadgetismo" irrelevante. Lo único que me impresiona son los ejemplos que he visto de
fotos de la Nikon D3 tomadas a altas sensibilidades. Ya se habla de chips de 51.200 ASA de sensibilidad nativa. Eso podría marcar una diferencia y sumado al crecimiento en los megas plantea un futuro oscuro para los respaldos de medio formato.
Recientemente una
web checa ha publicado un bonito reportaje sobre la presentación de la D3 en la fábrica japonesa de Nikon. La marca cumple 90 años y desde luego ha hecho un camino fructifero del tallercillo en que empezó a las instalaciones robotizadas que se ven en las fotos. Pero lo mas interesante son los rumores. En el
foro de dpreview, un tipo que conoce a un tipo que trabaja para una compañia de i+d que trabaja para Nikon dice que le adelantó que la compañía trabaja en 4 cámaras, y como las dos primeras ya se han hecho realidad (la D3 y la D30), supone que acertará también en las otras dos: Una cámara de gama alta, modular (visores y sensores intercambiables), con precio muy muy alto, destinada a uso profesional en estudio y aplicaciones científicas, y otra -esto es lo bueno- que sería una especie de Nikon SP digital, una cámara pequeña, con objetivos intercambiables, pero sin espejo ni pentaprisma. Vamos, una cámara de telémetro digital, con un visor, de hecho, que imitaría las dos imágenes superpuestas de las clásicas Contax, Leica o Nikon. Competiría con la M8, a menos de la mitad de su precio. Esa si que seria mi cámara ideal, esperemos que llegue pronto.
Mientras tanto, además de ahorrar, creo que le echaré un vistazo a la única novedad que me ha parecido interesante, la nueva Olympus 560 UZ que anuncia un nuevo procesado de imágenes (el anterior era ya francamente bueno) con un sistema de corrección de sombras para aumentar el rango dinámico y acercar mas el contraste a la reacción del ojo.
